Hoy os traigo otra exposición del Museo ABC, esta vez sobre la artista Amparo Sard. La exposición se encuendra dentro del programa Conexiones -un proyecto conjunto del Museo ABC y la Fundación Banco Santander que lleva desarrollándose ya tres años-, que nos presenta a un artista contemporáneo en cuya obra la vinculación con el dibujo sea significativa. En esta exposición, la sexta del programa, nos acercan a la mallorquina Amparo Sard en la que es la primera revisión importante de su obra en la capital (a pesar de exponer frecuentemente en el extranjero).
La obra de la artista se caracteriza por la técnica que utiliza y por su iconografía. Prácticamente toda su obra -salvo algunas excepciones en las que emplea otros lenguajes como la instalación y la videocreación- puede ser encuadrada dentro del dibujo. Un dibujo que emerge del papel a través de la punción del mismo, sin ayuda de trazos o cualquier otro elemento gráfico. Las imágenes se hacen visibles a través de miles de agujeros, más o menos profundos, a veces abultando el papel pero sin llegar a realizar la incisión, que conforman las líneas, las sombras y los relieves.
Amparo Sard, La otra, 1 2013, papel perforado |
Por otro lado, su iconografía, compleja y fascinante. Sus obras tienen como presencia central una mujer, La otra, en cierto modo autorretrato y alter ego de la artista, ella misma contemplada desde la distancia, que habita complejos espacios cerrados, ambientes perturbadores plagados de espejos, agua y sus reflejos, moscas... Composiciones extrañas, desconcertantes y sugerentes.
Amparo Sard, La otra, 2 2013, papel perforado |
Además de la obra de Amparo Sard, completan la muestra dos piezas procedentes de los fondos de la Colección del Banco Santander y del Museo ABC (respectivamente): El espejo de la muerte de Gutiérrez Solana, ca. 1929, y Cotufas en el golfo. Vivir más allá del aire. Homenaje a Ángeles Santos, de Julián Grau Santos, 1984. La pretensión de estas dos obras es entablar un diálogo con el trabajo del artista contemporáneo escogido. Si bien ambos cuadros tienen sus propias iconografías, efectivamente complejas, el diálogo con la obra de Amparo Sard me parece forzado. No obstante, la exposición merece muchísimo la pena, tanto por los dibujos perforados de la mallorquina como por las otras dos obras, aunque (al menos a mi parecer) queden un tanto independientes.
Amparo Sard, La otra, 3 2013, papel perforado |
Normalmente las imágenes no pueden hacerle justicia a las obras, pero en este caso es aún más sangrante, por lo que os recomiendo encarecidamente que os acerquéis a verla. Así que ya sabéis, si os apetece conocer a una artista diferente, tenéis la exposición en el Museo ABC hasta el 3 de febrero.
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